VIOLENCIA EN
GUATEMALA
Si nos
acoplamos a las creencias cristianas recordando que la mayoría de guatemaltecos
profesan una fe derivada del Cristo; diremos que la violencia, o ‘una conducta
que crea daños a través del poder y la fuerza’ se origina con la maldad de un
hombre que cometió fratricidio al privar de vida a su hermano menor, hablamos
de Caín y Abel; por lo tanto he ahí que se adquiere una nueva facultad humana,
la capacidad de amenazar a otros humanos partiendo de la premisa de una
potencia física superior.
Atravesando la
historia y aterrizando en Roma, el Derecho Romano llamaba ‘vis’ a esa fuerza,
al vigor que permite que la voluntad de
uno se imponga sobre la de otro. El código de Justiniano habla de una fuerza
mayor que no se puede resistir.
DEFINICIÓN DE VIOLENCIA
El Diccionario
de la Real Academia de la Lengua Española redirige de violencia a violentar, y
expresa: ‘violentar es aplicar medios violentos a cosas o personas para vencer
su resistencia’.
La violencia
puede ser psicológica, o maltrato emocional, represión política o intolerancia
dogmática a través de ofensas o actos inmediatos o sostenidos.
No es posible
identificar el inicio de la violencia en la historia de un país, sin embargo sí
lo es el hecho de identificar qué sucesos han marcado una nación a la fuerza.
Indudablemente El Conflicto Armado Interno suscitado de 1960 a 1996 es un
excelente punto de partida.
Fueron 36 años
de angustia humanitaria, cada día ocurrían múltiples muertes diarias, no
muertes, masacres, estas muchas veces sin justificación. La guerra más
incoherente jamás registrada o contada, dejó un saldo de 250 000 muertos o
desaparecidos, según estudios. Tanto el lado del ejército como el lado de la
guerrilla guardaban demasiado odio y desprecio hacia sus semejantes, esto,
según una escala próxima, desencadena violencia, y como fue el caso, muertes.
La teoría hizo su trabajo creando un documento que calmaría las aguas,
restablecería el orden y haría guardar fraternidad entre ambos bandos, no fue
así, el 29 de diciembre durante periodo presidencial del magnate Álvaro Arzú se
firmaron los Acuerdos de Paz, los cuales en total suman 12 acuerdos suscritos
por el principal, El Gobierno de la República y la Unidad Revolucionaria Nacional
Guatemalteca –URNG–.
Durante el
período de guerra existió un evento que marcó no solo a Guatemala, sino que fue
reconocido a nivel mundial como un exceso arbitrario de poder racista, hablamos
del Genocidio provocado por el gobierno, y su máximo exponente el ahora
sindicado Efraín Ríos Montt, estos sucesos le dieron un nuevo rumbo a la
historia de Guatemala.
Iniciando de
lleno la era democrática, sin guerras, sin alteraciones constitucionales, ni
circunstancias que alteraran el statu quo, empezó la corrupción política. Este
flagelo es el pan de cada día de los guatemaltecos y constituye una especie de
violencia.
Concretamos
entonces que: La violencia es agresividad alterada, principalmente, por
diversos tipos de factores (en particular, socioculturales) que le quitan el
carácter indeliberado y la vuelven una conducta intencional y dañina[1]
TIPOS DE VIOLENCIA
La
violencia no discrimina, ésta se manifiesta en todas las etapas y fases de
nuestra vida, en cada aspecto social, cultural, religioso, político, es más, la
violencia está adherida al ser humano, se podría considerar un ‘antiderecho
humano’ puesto que, es inherente, indivisible, intransmisible y sobre todo, lo
podemos ejercer.
Es
así pues, aunque existe una infinidad de ellas, como ciudadano logro
identificar ciertas facetas o manifestaciones de violencia, las más latentes y
cotidianas
a. Violencia
doméstica: conocida también como intrafamiliar, es la que surge dentro del seno
de la familia en convivencia y puede ser de uno o varios a otro u otros
miembros, es la forma más común de violencia, es la más conocida y la más
practicada. De ella surgen ciertas subdivisiones que hacen que sea más sencillo
identificar víctimas y victimarios en casos concretos. Se refieren a:
·
Violencia contra el varón: es la ejercida por la
mujer en la relación marital hacia su cónyuge masculino; o bien, por un varón
hacia otro en relaciones homosexuales. Es un tema tabú por el hecho que se ha
considerado al hombre como el sexo fuerte, y este suceso desvirtúa tal premisa.
Según cifras del Ministerio Público, de cada 10 llamadas de denuncias por
violencia intrafamiliar 2 son de hombres angustiados que sufren el flagelo.
·
Violencia contra la mujer: es la forma más
latente en un país machista y retrógrada, donde la mujer es considerada un
objeto – algo así como en Roma con el Paterfamilias, donde la mujer era un bien
que podía pertenecer a su padre, esposo o suegro –. En Guatemala se ha necesitado
crear una ley exclusiva que proteja los derechos mínimos de las féminas, siendo
ésta, la Ley Contra El Femicidio Y Otras Formas De Violencia Contra La Mujer,
según decreto 22-2008. En Guatemala producto de la poca cultura poseída por los
residentes, se ha convertido en prioridad blindar al sexo femenino con
demasiadas leyes procurando el no abuso a su integridad física, psicológica y
sexual; mostrando escasos resultados, o quizá, mostrando una degeneración o
contrariedad a los resultados esperados.
·
Violencia de género: este tipo de violencia es
exclusiva para menospreciar, agredir o incluso maltratar a alguna persona con
base en su género. Se desasocia de las demás formas mencionadas por el hecho de
que, las principales víctimas de este problema son personas de la comunidad
LGBT.
·
Violencia de pareja: es el confrontamiento
exclusivo suscitado entre varón contra mujer, es la pugna clásica de las
relaciones jóvenes o perdurables coetáneas estén o no asociadas a la
institución del matrimonio. En ella se engloban todas las agresiones y luchas
de los cónyuges o novios, en ocasiones, por mínimas molestias que a la vez
desencadenan complicaciones serias y de gran alcance familiar.
·
Violencia filio-parental: o violencia de los
hijos a los padres, son todas las actitudes constantes de agredir física,
verbal o psicológicamente hacia los padres o adultos en la familia por parte de
los hijos o descendientes. Con el transcurso de los años va cobrando
importancia y auge, llegando a ser una moda criticable y destructiva, el hecho
de que ‘el hijo mande al padre o a la
madre’.
b. Violencia
de Estado: es la exclusiva utilización de la fuerza en cualquier entidad
gubernamental que agobie a la población. Un claro ejemplo de ella, es la rebaja
diplomática del Estado a actuar como vengador en la Pena de Muerte, en su
especie de asesino autorizado se puede englobar las arbitrariedades del señor
Estado hacia su población. Y no necesariamente se llegue hasta la muerte, sino,
a la tortura o represión por intereses mezquinos de los dirigentes de los
órganos del Estado.
c. Violencia
escolar: acoso escolar, bullying, es
la tendencia del momento, el hecho de forzar a un estudiante dentro de las
instalaciones del establecimiento a realizar actos contra su voluntad o a ser
sujeto de burlas y amenazas. Esta es una forma muy peligrosa de violencia que, aunque
no llega a un homicidio o asesinato, obliga a la víctima a perder la autoestima
provocando menosprecio de sí mismo e incluso suicidio. Por su parte, el
victimario adquiere experiencia para convertirse en un exclusivo delincuente
habitual dispuesto a cometer los delitos más punibles en la sociedad
contribuyendo con su grano de arena a mantener al país en una guerra social
maras-policías.
d. Violencia
política: un trago amargo para la sociedad actual, este tipo de violencia es
tan cotidiano como la vida misma. Es sencillo apreciar cómo en el país, a
diario, los políticos con subterfugios ocultan sus sucios intereses y oprimen
la opinión pública, considero que el político habitual no es el culpable de
este acto, sino la burguesía elitista que controla un país rico productor de
riqueza para los más inteligentes e ilegales sujetos. Consiste en obligar a una
persona a actuar contra su voluntad o a restringirla totalmente con el afán de
lograr objetivos políticos a costa de cualquier persona o entidad estatal. Es
también utilizada por los pueblos para alcanzar intereses alejados de la
legalidad vigente del país.
e. Violencia
religiosa: no tan palpable ni tan oculta, este tipo de violencia es una de las
más antiguas manifestaciones que, irónicamente ha sido promovida por la Iglesia
Católica desde tiempos remotos. En la actualidad el ejemplo más claro es del
autoproclamado Estado Islámico que tiene en guerra al mundo con motivos de su
dios Alá, esto afecta en gran medida la vida de millones de personas en Medio
Oriente. En Guatemala, es tan notorio el odio que persiste entre las iglesias
cristianas esparcidas por el territorio, y aunque no llegue a confrontaciones
fuertes, sangrientas o mortales sí constituyen violencia al amenazar o
intimidarse unos contra otros en nombre de su dios que es todo amor.
f. Violencia
sexual: no es posible obviar las violaciones sexuales que diariamente son
motivo de una que otra página en el periódico, motivo de uno o dos minutos en
los noticieros locales. Se ha hecho muy popular abusar sexualmente de una
persona indefensa bajo la premisa de la incapacidad el sujeto de no lograr un ‘sexo consentido’, no es un suceso nuevo,
lo nuevo es los altos índices de violaciones en menores de edad. En el país
existen miles de niñas y niños violados por hombres enfermos que buscan
satisfacer sus necesidades sexuales.
g. Violencia
vial: la constituye el abuso en carreteras de las personas que perturban la vía
por diversas causas provocando múltiples accidentes de tránsito por distintas
razones, las más comunes el exceso de velocidad y el alcoholismo o consumo de
estupefacientes.
h. Otras
manifestaciones de violencia: existen alrededor del mundo múltiples maneras de
violentar o accionar contra una persona, se puede mencionar, la violencia
obstétrica, violencia en el noviazgo, violencia anarquista, violencia
anticristiana, entre otras, sin embargo, es importante destacar que en
Guatemala estas manifestaciones aún no son conocidas a cabalidad; pero cuando
lo sea, serán un éxito total en los noticieros más destacados.
Repasando mis
ideas la violencia nace con el hombre es imposible quitarla, es innata o
congénita para especificar mejor. Por lo tanto, difícilmente podríamos hablar
de erradicarla si no se es consciente de la misma.
CAUSA PRINCIPAL DEL PROBLEMA
Cultura.
La cultura la
asocia una persona común guatemalteca a la existencia de los pueblos indígenas
en el territorio nacional. Es decir, no sabemos qué es en sí la cultura, y
producto de esa ignorancia irresistible nos convertimos en sujetos repetidores
de otros actos internacionales, en unas simples fotocopias, no existe el don de
raciocinio, de cuestionamiento, de la capacidad de asombro, no existen tales
cosas y esto provoca un estado de conformidad en nosotros. Nos trazamos metas
sin imaginar que son límites, los demás piensan por nosotros, somos solo
marionetas, somos números en un papel, nada más que apariencia.
Como partícipe
de la sociedad, defiendo que la causa de la violencia es producto de la falta
de cultura ciudadana, la cual podemos definirla del siguiente modo: es un
sentimiento homogéneo de pertenencia por la ciudad, basada en el civismo, la
solidaridad, la tolerancia, el respeto y la convivencia pacífica.[2]
Aúno a la
falta de cultura, el exceso de comodidad del guatemalteco promedio, el exceso
en el confort y el poco interés en salir de la cueva de Platón, el encierro que
he observado en el ciudadano común, en el niño común, en el anciano común es
digno de una decepción colectiva, ser capaces de ignorar todo el sistema
social.
·
Sentencia: Culpable señor Estado: es propio del
ciudadano común culpar al Estado de todos sus problemas, si no hay un plato de comida
en la mesa, si no encuentra empleo, si sus hijos no reciben buena educación, si
no hay buena cosecha, si el perro no duerme en su casa, si el pájaro no canta,
si la escoba ya no barre, el culpable es el Estado, es en vano su existencia,
peleemos por la anarquía, ni Dios puede salvarnos, profesemos el ateísmo, en
fin, es tan sencillo culpar pero tan difícil actuar; o peor aún, es imposible
pensar y asimilar que se está en un problema llamado ignorancia.
“Mientras la sociedad considera que la
contemplación es lo más grave de lo que se puede acusar a un ciudadano, la
cultura más refinada piensa que es la ocupación digna de un hombre.”
Oscar
Wilde.
Debemos
recordar que la historia de la humanidad está marcada por hechos violentos, así
nos forjamos y la violencia no es más que un defecto más del hombre o quizá una
virtud, en todo caso, es inherente.
Johan Galtung
crea un concepto titulado “Triángulo de la Violencia”, muy útil para demostrar
la dinámica de la generación de la violencia en conflictos sociales. Él expone
que la violencia es como un iceberg, mostrando en tres los tipos de violencia:
La violencia directa, la cual es visible,
se concreta con comportamientos y responde a actos de violencia.
La violencia estructural, (la peor de las
tres), que se centra en el conjunto de estructuras que no permiten la
satisfacción de las necesidades y se concreta, precisamente, en la negación de
las necesidades.
La violencia cultural, la cual crea un
marco legitimador de la violencia y se concreta en actitudes.[3]
Inspirado en
el concepto anterior, tomé la libertad de desarrollar la escala de violencia en
base a la intención interna del individuo y la ejecución de algún acto
violento.
a.
Falta de cultura ciudadana: el origen de los
males, de esta ignorancia partimos para ser seres violentos y compulsivos para
con la sociedad.
b.
Discriminación y menosprecio: al avanzar en la
escala, nos topamos con el hecho de que una persona no nos simpatiza y tendemos
a crear un desprecio hacia ella llegando a la discriminación o burlas.
c.
Agresión física, sexual y psicológica: casi al
límite encontramos cómo la violencia se manifiesta fuertemente, ya sea
golpeando, violando sexualmente o menoscabando la integridad emocional de la
víctima.
d.
Asesinato: la culminación de la violencia, es la
última etapa, no hablo de homicidio, lo hago de asesinato, porque es una manera
más planificada y cruel de privarle del máximo derecho a un ser humano.
El conflicto en una cultura de
violencia se resuelve con amenazas o crímenes.
El conflicto en una cultura de
paz se resuelve mediante el diálogo.
POSIBLE SOLUCIÓN PARA ESE CASO
Considerando
que no es sencillo instaurar una cultura ciudadana y de paz en un país
ignorante, retrógrado, machista, inhumano, violento, corrupto, rico,
insensible, irrespetuoso, adiplomático y decreciente; lo mejor que puedo
plantear es una reforma al sector justicia, empezar por el estricto
cumplimiento a las normas del país.
Posterior a
ello veo necesaria una depuración congresista, una promoción al gremio jurídico
otorgando más poder al CANG, en fin, colocar en las entidades del Estado a
personas conocedoras y expertas, dejar el país en manos de quienes saben hacer
bien su trabajo, siendo vigilados por los órganos correspondientes de justicia.
Sinceramente,
no veo una solución a un problema anterior a la humanidad en una sociedad
decadente y nefasta.
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